Encuentros formativos
SILVER
TALENT
del Programa 45+
#EuropaSeSiente
Taller gratuito para desempleados de
más de 45 años residentes en Madrid
Inscripciones Cerradas
QUÉ ES SILVER TALENT
Silver Talent 45+ es una iniciativa del Programa Talento 45+ (Programa FSE+ de Educación y Formación, Empleo y Economía Social y cofinanciado por el FSE+) que ayuda a personas desempleadas entre 45 y 60 años que residan en la Comunidad de Madrid a impulsar su carrera profesional.
Un taller presencial de 5 horas con formación práctica en:
- Autoconocimiento y gestión emocional.
- Soft skills: liderazgo, resiliencia, motivación, emprendimiento.
- Inteligencia Artificial para el empleo: CV, entrevistas y networking.
- Testimonios inspiradores de profesionales que se reinventaron tras los 45.
BENEFICIOS
- Reforzar confianza y motivación.
- Descubrir las habilidades más demandadas por el mercado laboral.
- Aprender a usar IA en la búsqueda de empleo.
- Conectar con una comunidad activa +45.
REQUISITOS
- Tener entre 45 y 60 años.
- Residir en la Comunidad de Madrid.
- Estar en situación de desempleo.
- Disponibilidad para asistir presencialmente al taller.
BLOQUES TEMÁTICOS

Autoconocimiento y gestión emocional

Soft Skills Lab: resiliencia, liderazgo, motivación, emprendimiento.

IA para el empleo: CV, entrevistas, networking.

Testimonios reales de reinvención profesional.
PRÓXIMAS CONVOCATORIAS
Convocatorias
| Convocatoria | Fecha | Localización |
|---|---|---|
| 1. | 15/10/2025 | Cámara de Comercio Plaza Independencia 1. Salón de Actos, 1ª Planta |
| 2. | 23/10/2025 | |
| 3. | 29/10/2025 | |
| 4. | 06/11/2025 | |
| 5. | 13/11/2025 | |
| 6. | 14/11/2025 | |
| 7. | 18/11/2025 | |
| 8. | 25/11/2025 | |
| 9. | 27/11/2025 | |
| 10. | 03/12/2025 | |
| 11. | 11/12/2025 | Palacio de Santoña, Calle Huertas, 13 |
RECURSOS
Consulta, descarga y comparte estos recursos para apoyar tu formación en autoconocimiento y soft skills aplicada al empleo
Inteligencia Emocional
Poner nombre a lo que sentimos: descubre la rueda de Plutchik
Poner nombre a las emociones es un primer paso crucial en el desarrollo de la inteligencia emocional. Cuando una persona es capaz de identificar y etiquetar sus emociones, aumenta su nivel de autoconciencia. Esta autoconciencia es fundamental para manejar las emociones de manera efectiva. Si no podemos nombrar lo que sentimos, es difícil entender por qué lo sentimos y cómo esas emociones están influyendo en nuestro comportamiento.
La rueda de las emociones de Robert Plutchik es una herramienta poderosa para ello.
Parte de ocho emociones básicas (alegría, confianza, miedo, sorpresa, tristeza, aversión, ira y anticipación), que pueden combinarse e intensificarse, generando una amplia paleta de matices emocionales. La rueda muestra cómo unas emociones se relacionan con otras, cómo evolucionan y cuáles son sus opuestas.
En esta etapa profesional y vital, probablemente acumuláis experiencias muy diversas que os han hecho vivir situaciones de cambio, adaptación y reinvención. Justo por eso, identificar con claridad qué estáis sintiendo en un momento concreto —al enfrentar un nuevo reto, al volver a un proceso de selección o al asumir un rol distinto— puede marcar la diferencia. Reconocer una emoción nos da la oportunidad de gestionarla de forma constructiva: no se trata de eliminarla ni de “sentir solo lo positivo”, sino de comprender qué os está diciendo y cómo aprovechar esa información para actuar con mayor equilibrio.
Como talentos senior, podéis usar esta herramienta para mirar hacia dentro, ordenar vuestro mundo emocional y, al mismo tiempo, proyectar hacia fuera relaciones más conscientes, equilibradas y satisfactorias en todos los ámbitos de vuestra vida.
Al trabajar con la rueda de Plutchik, cada emoción deja de ser un obstáculo para convertirse en una valiosa fuente de información sobre vosotros mismos.
Creencias
Rompe el círculo de pensamientos que te limitan: crea tu mapa racional
A continuación presentamos una técnica de análisis, basada en la Terapia Racional Emotiva de Albert Ellis, que te permitirá profundizar de una manera práctica en el conocimiento de tus pensamientos, creencias y emociones. Tenemos el poder de modificar ideas que no nos ayudan, así como la forma en la que nos sentimos frente a esas ideas o ante determinadas circunstancias del entorno. Cuando no lo hacemos, solemos guiarnos desde esquemas poco útiles, que limitan nuestro bienestar y nuestra capacidad de actuar.
Ya sabes que lo que piensas influye en cómo te sientes y en cómo respondes a cada situación. El siguiente paso es aprender a configurar tu propio “mapa racional”, una herramienta práctica que te servirá de guía a la hora de realizar cambios en ti mismo. Este ejercicio te ayudará a alcanzar objetivos profesionales y personales, y a vivir con más claridad y sentido.
Para empezar, vamos a observar un ejemplo de mapa irracional. En él puedes ver cómo una situación cotidiana —en este caso, hablar en público— activa creencias poco realistas que generan pensamientos automáticos, emociones negativas y conductas que refuerzan la inseguridad. Como ocurre en muchos momentos de la vida, entramos así en un círculo vicioso que nos limita: anticipamos lo negativo, sentimos malestar, actuamos desde el miedo y reforzamos la idea de que “no somos capaces”.
El mapa racional nos invita a romper este círculo. Con él podrás identificar esas creencias y sustituirlas por pensamientos más realistas, flexibles y útiles. No se trata de negar las dificultades, sino de abordarlas desde un enfoque que te permita avanzar con mayor seguridad.
Este ejercicio es especialmente valioso en la etapa Silver, donde quizá te encuentres enfrentando cambios, nuevos proyectos o retos profesionales que requieren confianza y autogestión emocional. Elaborar tu mapa racional te permitirá poner el foco en lo que sí depende de ti, reinterpretar las situaciones de manera más objetiva y abrir espacio a conductas más eficaces y satisfactorias.
Descarga el esquema y dedica unos minutos a trabajar sobre él. Verás cómo poner por escrito tus creencias y transformarlas en ideas más racionales se convierte en un recurso muy poderoso para tu día a día.
Locus de control
Recupera el control de tu vida: Locus de Control
En este video exploramos el concepto de locus de control: la percepción que tienes sobre el origen de lo que te sucede, si está determinado por factores internos (tus decisiones, tus actitudes) o por factores externos (el entorno, la suerte, las circunstancias).
Comprender tu locus de control es fundamental para tu crecimiento personal y profesional, especialmente en esta etapa Silver. Si crees que tienes capacidad de influir sobre tus resultados, reaccionas con más iniciativa, resistes mejor los contratiempos y te haces protagonista de tu propia historia. Si tiendes a pensar que todo depende de fuerzas externas, corres el riesgo de sentirte impotente, reactivo o estancado.
Este video te ofrecerá claves, ejemplos y reflexiones que te ayudarán a:
- Identificar si tu locus de control es más interno o externo.
- Explorar cómo mover el centro de gravedad hacia decisiones y acciones propias.
- Tomar conciencia del impacto que esto tiene en tu bienestar, en tu autoestima y en tu capacidad de actuar con autonomía.
Te invito a que lo veas con atención y que después te plantees estas preguntas como ejercicio de reflexión para interiorizar el concepto y hacerte más consciente de tu propio estilo de control.
Preguntas de reflexión:
- ¿En qué áreas de tu vida crees que tienes un locus de control interno fuerte?
(Por ejemplo: salud, relaciones, proyectos personales, desarrollo profesional) - ¿En qué situaciones tiendes a percibir que todo depende de ?
(Por ejemplo: mercado laboral, decisiones de otras personas, imprevistos) - ¿Qué pensamientos o creencias te llevan a sentir que careces de control?
(Ej: “no me escucharán”, “no tengo alternativas”, “es lo que hay”) - ¿Qué ejemplos concretos puedes identificar en tu vida reciente en los que reaccionaste como si no tuvieras opciones?
- ¿Cuál sería un pequeño cambio de actitud o hábito que podrías empezar hoy para reforzar tu locus de control interno?
- ¿Cómo cambiaría tu percepción de los retos si asumieras que tienes al menos parte del poder de influir en ellos?
Emociones
El lenguaje emocional. Esto que siento… ¿qué me quiere decir?
La palabra emoción viene de E = energía y motion = movimiento. Es decir, energía en acción.
Aunque solemos hablar de las emociones con verbos de “no acción” como sentir o experimentar, en realidad las emociones son una fuerza poderosa que nos impulsa a actuar. Funcionan como una brújula interna que orienta nuestras decisiones y comportamientos, tanto en el corto como en el largo plazo.
En muchas ocasiones, cuando sentimos una emoción intensa, tendemos a reaccionar sin detenernos a pensar qué hay detrás de esa sensación. Sin embargo, cada emoción trae consigo un mensaje que: nos alerta, nos protege, nos invita a revisar algo dentro de nosotros, etc. La clave está en pasar de la reacción inmediata a la reflexión consciente.
Y aquí el lenguaje cumple un papel fundamental. Poner palabras a lo que sentimos nos permite dar forma, ordenar y entender mejor la experiencia emocional. No es lo mismo dejarse arrastrar por “estar enfadado” que preguntarse: “¿Qué es lo que me duele de esta situación?” o “¿Qué necesidad no se está cubriendo?”. A través del lenguaje, transformamos la emoción en una conversación con nosotros mismos.
Cuando introducimos el lenguaje en este proceso, añadimos un puente entre sentir y actuar: preguntarnos. La imagen que acompaña este post (y que puedes descargarte) propone precisamente algunas preguntas que pueden estar detrás de las emociones que experimentamos y que nos ayudan con ese diálogo interno.
De esta manera, el lenguaje no solo nombra la emoción, sino que la traduce en aprendizaje y en acción significativa.
Te invito a mirar la tabla, identificar qué emoción has sentido con más fuerza en los últimos días y detenerte un momento en la pregunta asociada. Deja que tu respuesta te muestre un camino para la acción.
Efecto Pigmalión
¿Cuánto talento estamos desperdiciando por nuestras expectativas?
El efecto Pigmalión describe un fenómeno fascinante y, a la vez, cotidiano:
las expectativas que tenemos sobre una persona influyen directamente en su comportamiento y en su rendimiento. Cuando confiamos en alguien, esa confianza se transmite a través de pequeños gestos, palabras o actitudes y acaba reforzando su motivación y su desempeño. Pero cuando partimos de una expectativa baja, incluso sin intención, podemos limitar su crecimiento.
Por ejemplo, cuando un responsable de equipo asume que una persona joven “todavía no tiene experiencia suficiente”, tiende a asignarle tareas operativas o de apoyo. Con el tiempo, esa falta de exposición y reto puede generar justo lo que se temía: menor iniciativa o falta de visión global.
Pensemos ahora en una profesional senior, con años de experiencia en el área comercial. Si su entorno asume que “ya no está tan al día o no tiene interés en herramientas digitales”, probablemente nadie le propondrá formarse en la nueva plataforma de ventas o liderar un proyecto de transformación. Si además ella misma internaliza esa idea, se apartará voluntariamente de esos espacios, y poco a poco su papel quedará reducido a la rutina.
Así, la expectativa actúa como una profecía: lo que creemos, lo provocamos.
Pero hay un segundo nivel del efecto Pigmalión del que se habla menos: las expectativas que tenemos sobre nosotros mismos.
Con los años, también podemos ir construyendo nuestras propias etiquetas internas:
“Ya no tengo la misma agilidad mental.”
“Esto de la tecnología no es lo mío.”
“Los jóvenes vienen pisando fuerte, mejor no competir.”
Y lo curioso es que, al creerlo, empezamos a actuar en consecuencia:
si pienso que no sabré adaptarme, no me apunto a la formación;
si pienso que no tengo nada nuevo que aportar, dejo de proponer ideas;
si creo que ya no es mi momento, me vuelvo espectador de mi propio talento.
Así, el efecto Pigmalión también opera como un espejo: lo que creemos de nosotros determina cómo nos comportamos, y ese comportamiento refuerza la creencia inicial.
Romper ese ciclo implica revisar nuestras narrativas internas. No se trata de negar el paso del tiempo, sino de reconocer que la experiencia también evoluciona, que la curiosidad no tiene edad, y que el aprendizaje es un músculo que solo se atrofia si dejamos de usarlo.
El verdadero desafío para el talento sénior no está en competir con lo nuevo, sino en redefinir su rol desde la influencia y la inspiración: aprender, acompañar y seguir creciendo. Porque el potencial no caduca; solo necesita creencias que lo sostengan.
Creatividad
En el contexto actual del mercado laboral, la búsqueda de empleo para perfiles senior requiere una adaptación a nuevas dinámicas y competencias. Las habilidades técnicas, aunque fundamentales, ya no son suficientes por sí solas. Las empresas valoran cada vez más las soft skills o habilidades blandas, entre las que la creatividad se destaca como una de las más relevantes.
La creatividad, entendida como la capacidad de generar ideas nuevas y útiles, es esencial en entornos laborales que demandan innovación y adaptación constante.
Sin embargo, la creatividad no se limita a la “generación de” , sino que se extiende a la capacidad de aplicar una experiencia de manera flexible y adaptativa. Dicho de otra manera: saber reinventarse y adaptarse a los nuevos contextos en base a las habilidades propias y a la capacidad de aprendizaje. O dicho de otra manera: lo que haces continuamente como profesional senior en búsqueda activa.
Algunas de estas acciones implican:
- Reinventar tu marca personal: Actualiza tu CV y perfiles profesionales para reflejar no solo tu experiencia, sino también tus logros y habilidades de manera creativa.
- Participar en proyectos interdisciplinarios: Colabora en iniciativas que requieran la integración de diferentes áreas de conocimiento, demostrando tu capacidad para innovar y adaptarte.
- Mentoría creativa: Comparte tu experiencia con generaciones más jóvenes, aportando perspectivas frescas y soluciones innovadoras a problemas tradicionales.
Una herramienta destacada para fomentar la creatividad en la búsqueda de empleo es Canva. Esta plataforma de diseño gráfico en línea permite crear una variedad de materiales visuales, como: currículums creativos, cartas de presentación personalizadas, tarjetas profesionales, portafolios digitales, etc.
Canva ofrece una interfaz intuitiva y una amplia gama de plantillas que facilitan la creación de estos materiales sin necesidad de experiencia previa en diseño gráfico.
Ejemplos Prácticos con Canva que pueden inspirarte:
- CV Interactivo: Diseñar un currículum interactivo, incorporando enlaces a proyectos anteriores, testimonios de colegas y una línea de tiempo de tu carrera.
- Presentación en Video: Crear una presentación en video donde compartas tu trayectoria profesional, habilidades y motivación para el puesto. Utilizar Canva para diseñar gráficos y animaciones que hagan tu presentación más atractiva y memorable.
- Portafolio Digital Visual: Desarrollar un portafolio digital que muestre proyectos destacados, resultados alcanzados y competencias clave, con un diseño limpio y profesional que facilite la navegación.
- Infografía de Logros Profesionales: Resumir tu carrera en una infografía visual que destaque logros, habilidades y experiencia de forma clara y atractiva para reclutadores.
- Flyer de Servicios Profesionales: Crear un flyer que presente tus servicios o propuestas de valor, útil para networking o contactos directos con empresas.
- Carta de Presentación Creativa: Diseñar cartas personalizadas que combinen texto y elementos visuales para reflejar tu personalidad y adaptarse a cada empresa u oferta.
- Post Profesional para LinkedIn: Crear posts visuales que compartan tus experiencias, aprendizajes o reflexiones, destacando tu expertise y tu creatividad en la comunicación.
- Plantilla de Email Profesional: Elaborar emails de presentación con un diseño cuidado, incorporando gráficos o iconografía sutil que reflejen tu estilo profesional.
Ejercicio práctico:
Ahora que conoces 8 formas de aplicar la creatividad en tu búsqueda de empleo utilizando Canva, es momento de pasar a la acción.
Elige uno de los 8 ejemplos que más se adapte a tu objetivo profesional:
Accede a Canva (www.canva.com/templates) y comienza a diseñarlo. Explora las plantillas, ajusta colores, iconos y tipografía para que reflejen tu estilo y tu experiencia.
Te dejamos aquí un par de tutoriales por si es la primera vez que utilizas Canva:
- https://www.youtube.com/watch?v=VPgpnSxs-nY
- https://www.canva.com/design-school/courses/canva-essentials
Este último tutorial está en inglés, pero puedes configurar los subtítulos para que aparezcan en español.
Comparte tu creación: una vez terminado, revisa cómo comunica tu propuesta de valor y, si te sientes cómodo, comparte el resultado con un mentor, colega o en tu red profesional.
CASOS DE ÉXITO















